Cada día encontramos más empresas que utilizan sistemas No Code o Low Code en su software o en su desarrollo diario, y no es de extrañar, pues las posibilidades y el ahorro de tiempo y esfuerzo que te aportan ese tipo de herramientas bien lo valen.
Los sistemas No Code permiten a gente no experta en software, realizar acciones que tradicionalmente se habrían encargado a un programador. Entre esas acciones tenemos crear una página web decente, automatizar ciertos procesos o hacer una app, entre otros. Todo ello es posible para los no versados en programación gracias a las herramientas No Code. Acostumbran a ser plataformas online visuales e intuitivas con elementos creados previamente para poder automatizar ciertas tareas o conexiones de información.
En la vertiente de la automatización, los servicios No Code más destacados, y con cuentas gratuitas iniciales muy prácticas, son plataformas como Zapier, Integromat o IFTTT. Pero también son vitales, y están presentes en muchas empresas, sistemas No Code como Mailchimp que permite desarrollar y organizar Newsletter, segmentar las comunicaciones, maquetar un email o crear una audiencia propia. Asimismo, el servicio automatizado No Code Typeform es capaz de enviar encuestas a tus clientes de manera totalmente segmentada y exportarlas a continuación, a un Airtable o Google SpreadSheet, o bien analizarlo en Create ML sin conocimientos de programación. No podemos olvidar servicios de SMS o Push Notifications que también se pueden automatizar a través de servicios No Code como Firebase de Google, Twilio, Salesforce o SNS de Amazon.
Para perpetuarse en el sistema y hacer crecer el negocio, esas plataformas No Code ofrecen servicios cada vez más personalizados con los que pueden integrar para tu negocio miles de plataformas de terceros para que puedan comunicarse entre ellas, avanzando en los servicios de automatización.
Llegados a este punto, es importante marcar la diferencia entre herramientas No Code y Low Code, porque si en las primeras decíamos que no hacía falta conocimientos previos en programación, con las segundas, sí sería necesario que aportes unos conocimientos mínimos de programación. Si tienes que crear una app tienes herramientas Low Code como Oracle Visual Builder, Salesforce Lighting Platform o Power Apps de Microsoft. Y para apps móvil, Google ofrece su sistema Low Code Appsheet con el que puedes crear una app móvil de forma muy intuitiva. Y si lo que necesitas para tu negocio es crear una Web propia, el sistema Webflow forma parte de las herramientas Low Code con las que podrás desarrollar correcta y satisfactoriamente una web tanto en la parte del diseño como en las interacciones que necesites para completarla.
Aún hay más, si quieres crear una tienda online, herramientas Low Code como Shopify son una bendición. Con intuición y un mínimo conocimiento de programación, puedes tener tu tienda online y empezar a gozar de los beneficios que te reporte.
Como ves, las herramientas No Code y Low Code vienen a facilitarnos la vida e instaurar un nuevo sistema creativo práctico e intuitivo. Las posibilidades son infinitas, desde crear flujos sencillos que envíen un mensaje automático, hasta sistemas que consultan el correo y escriben un registro en Google Spreadsheet. O servicios que puedes comunicar entre sí como Drive, Dropbox, Stripe, envío de SMS, Gmail, etc. Cada día surgen nuevos agregadores que acumulan herramientas que pueden interactuar con estos servicios sin necesidad de ser un experto en programación. Uno de ellos es Nocode.tech, otro Codeless How, ambos con videotutoriales que explican cómo llevar a cabo las integraciones.
Los No Code y Low Code suponen una evolución en la industria del software, pero debes tener en cuenta que su gran aportación no reemplaza totalmente a los programadores. Pero obviamente, gracias a esas herramientas No Code y Low Code, podemos interactuar creativamente en la red de maneras que antes no podíamos imaginar.
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